EL PAGANISMO DEL ROSARIO
EL PAGANISMO DEL ROSARIO
EL LLAMADO ROSARIO, ES UN AMULETO PAGANO, NADA QUE VER CON LA PALABRA DE DIOS.
Y AQUI, A LOS CATOLICOS, SE LES VA A REFUTAR DE QUE EL ROSARIO SEA BIBLICO, Y SE LES DARA EL VERDADERO ORIGEN DE ESTE AMULETO PAGANO.
EL ROSARIO ES UN AMULETO Y PROTEGE A NADIE, Y TAMPOCO PURIFICA LAS ALMAS.
EL CATOLICISMO CON ESTAS IDEAS, ESTAN RECHAZANDO EL SACRIFICIO DE JESUS, QUE ES EL UNICO QUE NOS PUEDE Y NOS PURIFICA.
JESUS NI LOS APOSTOLES TENIAN EL ROSARIO Y DESPUES DE QUE JESUS Y LOS APOSTOLES MURIESEN, NO EXISTE UNA SOLA ENSEÑANZA DE UN ROSARO Y MUCHO MENOS ORACIONES HACIA MARIA.
JESUS FUE EXTRITO SOBRE LA ORACION Y A QUIEN HAY QUE IR EN ORACION, RUEGOS Y PETICIONES Y EN NOMBRE DE QUIEN.
PERO LOS CATOLICOS, COMO SIEMPRE, ADOCTRINADOS CIEGAMENTE, LES HAN METIDO DE QUE EL ROSARIO ES BIBLICO. Y ESTA MOSTRADO QUE NO ES BIBLICO Y QUE NO EXISTE UNA SOLA ORACION DEDICADA A MARIA.
TAMBIEN EXISTE EL ROSARIO BUDISTA, EL CHINO...ETC.
ASI QUE...¿ES BIBLICO? LOS HECHOS DE VER COMO LO USAN EN TODO EL MUNDO COMO UN AMULETO DE LA SUERTE, PARA PROTEGERSE, PARA PUERIFICAR EL ALMA, ETC, DA A VER QUE ES PAGANOS.
LOS CATOLICOS PONEN VERSICULOS, PARA JUSTIFICAR EL ROSARIO Y PAJARA JUSTIFICAR LAS ORACIONES DEDICADAS A MARIA, CUALES VERSICULOS NADA QUE VER TIENEN CON LA ORACION QUE JESUS ENSEÑO.
DESDE PEQUEÑO, HE TENIDO UN RECHAZO HACIA LAS ENSEÑANZAS CATOLICAS. NUNCA HE VISTO A ESAS ENSEÑANZAS, ENSEÑANZAS ESPIRITUALES. SIEMPRE LAS HE VISTO VACIAS Y CON ENGAÑOS. Y ESTOY SEGURO DE QUE FUE DIOS QUIEN ME ESTABA AYUDANDO A NO ACEPTAR AL SISTEMA CATOLICO.
LA VERDADERA HISTORIA DE EL ROSARIO

Para la Iglesia Romana, el Rosario es un ejercicio religioso en el que se recitan oraciones. Por extensión, el instrumento empleado para seguir este ejercicio, también es llamado rosario.
El rosario -al igual que la cruz- es un instrumento de origen pagano. Su uso estaba bien difundido en diferentes culturas mucho antes que apareciera el cristianismo. En Citium (Chipre), lugar que había sido colonizado por los fenicios, se encontró un medallón que tiene grabado un círculo de cuentas que se semejan al rosario. Este rosario fue usado en el culto a Astarté, la diosa-madre, cerca de ochocientos años antes de Cristo. Este mismo «rosario» se puede ver en muchas de las monedas encontradas que se usaban en Fenicia. En el Islam el rosario lleva 33 o 99 cuentas de color ámbar y su práctica consiste en contar toda la serie para recitar los 99 nombres más hermosos de Alá recogidos en el Corán.
También era usado en los días de la Roma pagana, donde las mujeres se adornaban el cuello con el monile [1], una cierta clase de collar-rosario, no solamente por razones de adorno o coquetería, sino como recordatorio para la oración en sus religiones paganas.
Los rosarios hindúes y budistas se componen de 108 cuentas (112 en el budismo japonés). En el budismo, las 108 cuentas simbolizan los 108 pecados o fallos a los que tiende la especie humana. Los adoradores de Siva tienen un rosario con el cual repiten, si es posible, todos los mil ocho nombres de su dios. Los jainíes [2] emplean un rosario de 150 cuentas. En la Iglesia Ortodoxa Oriental de Grecia y Turquía, el rosario se llama kombologion [3] y es usado casi con exclusividad por los monjes. El instrumento empleado tiene 100 cuentas de idéntico tamaño.
El vertitza [4] Ortodoxo ruso , chotki [5], o lievstoka [6] está hecho con 103 cuentas. En la iglesia Rumana, el rosario se llama matanie [7], porque el monje hace una inclinación profunda al principio y al fin de cada oración contada con las cuentas.
Nadie puede negar el hecho de que el instrumento del rosario era usado en la época pre-cristiana, por religiones no cristianas. Incluso la misma Enciclopedia Católica dice: "En casi todos los países nos encontramos con algo similar al rosario para contar las oraciones". Considerando que su uso no tiene base bíblica y que su origen proviene de remotas costumbres paganas, el rosario no es más que otro ejemplo de cómo el paganismo fue mezclado con la religión católica. Hoy día, se lo reza en todas las iglesias católicas. De acuerdo con la tradición, la introducción del rosario en el culto católico -a principios del siglo XIII- se debe al teólogo español santo Domingo de Guzmán (fundador de la Orden de los Dominicos), pero no existe prueba alguna para tal afirmación.
Sin embargo, esta práctica fue adoptada en el siglo III por los monjes cristianos Orientales, y se desarrollaron varias formas del rosario. En el Catolicismo romano, el rosario se transformó rápidamente en un medio popular para la oración, tanto pública como privada. El rosario más común es el rosario de la Virgen Maria. Su devoción se desarrollo lenta y gradualmente entre la gente iletrada, probablemente como un sustituto más simple del recitado de los salmos. Alcanzó su forma definitiva en el siglo XV a través de la prédica del domínico Alan de la Roche y sus seguidores, que organizaron las Cofradías del Rosario, en Douai (Francia) y en Colonia. En 1520 el Papa León X aprobó oficialmente el rosario, y su uso fue encomendado repetidamente a los creyentes, por la iglesia católica romana.
El rosario (instrumento) que se usa en la actualidad, es una cadena (o cordel) con quince series de pequeñas cuentas; cada serie está separada por una cuenta de mayor tamaño. Los extremos de la cadena se unen con una medalla con la efigie de Maria, y de esta medalla cuelga una cadena corta, con una cruz, otro símbolo pagano.
Las "cuentas" en el rosario son para llevar control del número de veces que se deben recitar cada una de las oraciones, las cuales son repetidas, una tras otra, con uniforme e hipnótica cadencia.
La oración más frecuentemente repetida y la principal del rosario, es el "Avemaría". El texto del Avemaría es el siguiente: "Dios te salve, María; llena eres de gracia, el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén".
Recitar el rosario completo ocupa quince minutos. La forma más generalizada consiste en la repetición del Avemaría 53 veces, del Padrenuestro 6 veces, 5 misterios, 5 meditaciones de los misterios, 5 glorias y una repetición del llamado "Credo de los Apóstoles". Al acabar se recita la doxología [8], "Gloria a Dios". Esto significa invertir -solo para rezar el Rosario- cerca de un año de la vida de una persona, considerando las actuales expectativas de vida. Ni que decir de los oradores mas entusiastas, que rezan más de un rosario diario y en ocasiones, algunas oraciones adicionales.
Los creyentes más fervorosos (o aquellos que disponen de más tiempo) repiten diariamente -o debieran repetir- 53 veces, que somos pecadores, que necesitamos de auxilio divino para redimirnos, sin el cual, solo el horrible tormento del infierno nos aguarda. Repetir esto 53 veces durante 365 días y a lo largo de los años que tengamos la fortuna (o desgracia) de vivir, genera un creciente complejo de culpabilidad. A nivel conciente, el memorizar oraciones y luego repetirlas mecánicamente una y otra vez mientras contamos las bolitas, termina por convertirse más en un ejercicio de memoria sin valor, que una expresión espontánea del corazón.
Curiosamente, el Avemaría es repetido nueve veces más que el Padrenuestro. Pareciera que es más importante o efectiva una oración compuesta por hombres y dirigida a María, que una oración enseñada (supuestamente) por Jesús y dirigida a Dios mismo. Tal énfasis en la "madre" indica a las claras la mezcla del paganismo en el sistema de la Iglesia de Roma. No hay que perder de vista el hecho de que nuestras peticiones serán realmente contempladas, si contamos con la intercesión de María a nuestro favor...
Existen numerosas variables de estas cadenas de oraciones. Las hay para muchos "intermediarios" divinos y para muchas imágenes objeto de devociones, por ejemplo, el Rosario dedicado a las "santas llagas" de Jesús. Se sostiene que fue el mismísimo Señor quien lo enseñó a una religiosa de la congregación de las Salesas del Monasterio de la Visitación de Santa María de Chambery, la Hermana María Marta Chambon, "muerta en olor de santidad" el 21 de Marzo de 1907. El Señor se dignó hacerle -en favor de las almas que rezaren dichas invocaciones- promesas consoladoras y regaladísimas. Este rosario, además de rezarse en los Monasterios de la Visitación (Salesas) de todo el mundo, lo rezaba la famosa religiosa española Sor Eusebia Palomino (!).
El repetir una oración una y otra vez es indicado en la misma Biblia como una práctica del paganismo. En Mateo 6.7 se pueden leer las claras recomendaciones que Jesús hiciera sobre este particular: "Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos".
Jesús fue muy preciso sobre este aspecto y su parecer sobre la multiplicidad de oraciones no deja lugar a duda de ninguna especie: "No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de que cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis"; "Vosotros orareis así: Padre nuestro que estáis en los cielos...". [9]
De todas las oraciones del rosario, la única que es tomada directamente de la Biblia, es el "Padrenuestro". Sin embargo, el énfasis está puesto en la oración a Maria, que es la que más veces se repite. Esto es una clara falta de respeto a quien se supone es la fundamental fuente de inspiración de la religión católica (Jesús). No solo se ignora su pensamiento, sino que se lo desvirtúa, agregando nuevas oraciones y repeticiones a las que él se oponía, que solo tienen por objeto crear verdaderas cadenas de dependencia psíquica.
A pesar del claro origen pagano del Rosario y de las oraciones en general, el Vicario de Cristo no vacila en recomendar y estimular esta costumbre, lo que se desprende de su Carta Encíclica "Gratia Recordatio" [10] sobre el rezo del "santo rosario". En ella, el Papa Juan XXIII recuerda a los creyentes que el rosario "es una muy excelente forma de oración". Señala además -como lo hiciera León XIII en sus encíclicas- [11] que el rezo del santo Rosario tiene el poder de lograr "la poderosísima intercesión de la Virgen Madre de Dios", aseveración que también efectuara Pío XII en su encíclica Ingruentium malorum [12].
De la lectura de esta encíclica y de las conclusiones del Concilio Vaticano II, se establece lo siguiente:
1. Que la vida religiosa contemplativa de los católicos es incompleta si no está presente el amor a María y que ese amor se manifiesta especialmente rezando el rosario, "adecuado, hermoso y eficaz" instrumento (p. 251).
2. Que el Rosario es una práctica de la piedad y "una de las mejores y más eficaces oraciones" (pp. 865, 866).
Estas aseveraciones representan la verdadera posición oficial actual del catolicismo. Creer lo contrario revela falta de conocimiento.
La oración del Rosario no es el "epítome del Evangelio" como alega el Catolicismo de hoy, sino de hecho, una oración que cambia a Jesús por María y la exalta hasta una posición de idolatría como "Reina de los Cielos". El paganismo de las llamadas religiones idólatras sigue ocupando un lugar de privilegio en la Iglesia de Roma: la Virgen María es la Semiramis babilónica; en los diferentes pueblos donde se extendió el culto a la madre y el hijo existió la "Reina de los Cielos"; entre los chinos se llamó "Shingmoo" (santa madre), para los germanos fue "Herta" y "Disa" para los escandinavos; los etruscos la llamaron "Nutria" y los druidas "Virgo Paritura" (madre de Dios); fue "Ceres" para los griegos, "Nana" para los sumerios y "Venus" para los devotos romanos de los primeros tiempos. "Cibeles" fue en Asia la reina-virgen del cielo y también dio fruto ("Deoius") sin haber concebido. También merecen mencionarse a "Astaroth", la diosa-madre de los hijos de Israel apostatas [13]. Astaroth también fue conocida por los israelitas como "la Reina de los Cielos" [14], a "Isis", en el antiguo Egipto y a "Diana" -la gran divina madre- a quien dedicaron en Éfeso el más colosal de los templos, que se consideró como una de las Siete Maravillas del Viejo Mundo. [15]
ORIGEN PAGANO DEL ROSARIO.
Cuando los misioneros católicos visitaron la India, Japón y México por vez primera, sitios éstos en los cuales el nombre de Cristo jamás se había escuchado, se sorprendieron al encontrar rosarios usados por los paganos. Los adoradores del demonio en el Tíbet y China usan rosarios para sus rituales. Los rosarios son frecuentemente nombrados en los libros sagrados de los hindúes. El rosario era usado en la Grecia asiática y tal es el objeto con canicas visto en las estatuas de la diosa Diana. Escritos de dos y tres siglos antes de Cristo mencionan el uso del rosario dentro de varias religiones paganas.
De todas maneras, ni Cristo ni los apóstoles enseñaron nunca a orar empleando algún instrumento u objeto para contar las oraciones. El memorizar oraciones y luego repetirlas una y otra vez mientras que contamos las canicas, realmente se convierte en un ejercicio de memoria en vez de una expresión espontánea del corazón. Considerando que su uso no tiene base bíblica y que su origen proviene de tribus aborígenes paganas, el rosario no es más que otro ejemplo de cómo el paganismo fue mezclado con la religión católica.
El Rosario y el Mala

También era usado en los días de la Roma pagana, donde las mujeres se adornaban el cuello con el monile, una cierta clase de collar-rosario, no solamente por razones de adorno o coquetería, sino como recordatorio para la oración en sus religiones paganas.